Probiótico Vital Can 15 ml

Revitalizante y biorregulador natural de la flora intestinal, suplementado con vitaminas y minerales, para controlar y prevenir los problemas de mala digestión, diarrea, estreñimiento, flatulencia, cambio de alimentación y alergia alimentaria.

Coadyuvante en todos los problemas asociados al mal estado del pelo y lesiones en la piel a corto y medio plazo.

Indicado tras la toma consecutiva de antibióticos, para regenerar la flora intestinal. Asimismo, se puede administrar junto con otros tratamientos específicos que instaure el veterinario.

La dosis es de 2 gramos al día en una sola aplicación durante 7 días (independientemente de peso, sexo y edad).

Los alimentos probióticos son aquellos que contienen microorganismos concretos en número suficiente para alterar o modificar la flora intestinal. Ejercen efectos beneficiosos para la salud del animal. Tienen un efecto beneficioso en la diarrea aguda mejorando la intensidad y duración de la misma. Además previenen la diarrea asociada al uso de antibióticos de amplio espectro. Actúan acidificando la luz intestinal, segregando sustancias que inhiben el crecimiento de microorganismos patógenos, consumiendo nutrientes específicos o uniéndose competitivamente a los receptores intestinales de forma que mantienen la flora intestinal y evitan la acción de gérmenes patógenos. Al ser un gran productor de ácido láctico (es una lactobacteria), consigue disminuir el pH, acidifica el medio y, por tanto, favorece el desarrollo de bacterias lácticas, reforzando así su propia actuación, ralentiza la multiplicación de los microorganismos potencialmente patógenos, con lo que disminuye la presión microbiana ambiental. Previene el estrés del destete debido a la mejora que lleva a cabo en el aparato digestivo de los animales, facilita la recuperación de la flora bacteriana tras el tratamiento con antibióticos. Las bacterias lácticas, como el Enterococcus faecium, resisten la acción de los jugos gástricos y llegan al intestino delgado, donde se multiplican y ejercen un efecto barrera dificultando la adhesión de la flora patógena y su desarrollo.